En la era del cibermundo, de lo híbrido entre lo
virtual y lo real, la ciberpolítica o ciberactivismo, como nueva forma de hacer
política, tiene un peso importante en el actual proceso político
norteamericano.
El presidente Barack Obama es el ciberpolítico más
importante de nuestro tiempo, ya que logró en su campaña presidencial de
2008 articular diversas simpatías en las
redes sociales. Su estrategia electoral de movilizar millones y millones de
sujetos cibernéticos a través de YouTube, Facebook, Twitter, Blogger,
mensajería, correos electrónicos, le convirtieron en un ganador. A partir de
ese momento, el impacto de las redes sociales
colocó a los Estados Unidos como paradigma de estudio de la cultura ciberpolítica,
específicamente en material electoral.
El ciberespacio
con sus redes virtuales como Twitter, Facebook y YouTube se han convertido en
protagonistas de las elecciones presidenciales en los Estados Unidos, ya que el
contagio de estas redes se harán sentir a favor del presidente Obama.
Esa simpatía, ese contagio, quizá no tendrá la
misma intensidad que en el primer
proceso electoral cuando Obama fue favorecido ampliamente con el voto
mayoritario. Para tal afirmación hay que tomar en cuenta el desgate que se
sufre cuando se tiene ya un período presidencial y más cuando su política de reformas sociales, de salud y
de educación han quedado a medias, por la lucha y las relaciones de poder que
libra con los republicanos y los conservadores más reaccionarios de
Norteamérica.
A pesar de esta
situación, los cibernautas de la Unión Americana, que viven en el mundo de las
redes sociales, le favorecen con un segundo período presidencial. Dichas redes tienen una capacidad de incidir en las elecciones de
este marte 6 noviembre, ya que más de un 78 % de sus 313 millones de ciudadanos navegan por el
ciberespacio. Esto se puede distribuir entre la principales redes, Facebook
con un 70%, Blogger con un 24% y
Twitter 13%.
El
poder que despliegan las redes en el proceso electoral de Norteamérica se
manifiesta en el mismo instante en que
dos amigos, vecinos o allegados votan y por medios de dichas redes inciden en
los cambios de conductas, de opiniones a
favor o en contra de un candidato. Si
partimos de que en las redes sociales
Obama le lleva amplia ventaja a su rival republicano Mitt
Romney, en cuanto a suscriptores y simpatía, es de
suponer que esto incidirá, ya que las recomendaciones, el contagio, las
discusiones, la voluntad de ir a votar tienen su incidencia en el ciberespacio.
Por lo que apostamos a que el presidente Barack Obama
siga siendo el ciberpolítico más influyente del mundo y
el cibermundo.